Alrededor de cien vehículos fueron atacados o incinerados en varios puntos del norte de Colombia por miembros del Clan del Golfo en represalia por la extradición del capo Otoniel, informaron autoridades este viernes.
En dos días de «paro armado» impuesto por la organización que comandaba «más de cien vehículos (…) han resultado con afectaciones», dijo el ministro del Interior, Daniel Palacios.
Durante un recorrido por el norte del departamento de Antioquia, periodistas que hablaron bajo reserva vieron camiones incinerados en las márgenes de las vías y se encontraron con un comando armado de seis hombres, uno de ellos con fusil y los otros con armas cortas, que detuvo un vehículo y obligó a descender a sus ocupantes, antes de prenderle fuego.
«Existe un modo de operación de un individuo o dos individuos que se movilizan en motos, se bajan, intimidan a un vehículo y generan la afectación», añadió Palacios tras un consejo de seguridad en el norte del país.
Otoniel, de 50 años, fue extraditado el miércoles desde Bogotá a Nueva York donde responde por tráfico de cocaína. Se declaró inocente ante una jueza del tribunal de Brooklyn. La próxima audiencia está prevista para el 2 de junio.
El jueves el Clan del Golfo, en represalia, anunció un paro armado de cuatro días en sus zonas de influencia en Antioquia y los también departamentos de Córdoba, Sucre y Bolívar.
Hasta su detención en octubre de 2021, Otoniel comandó esta organización responsable del 30% (unas 300 toneladas) de las exportaciones de cocaína del mayor productor mundial de esa droga. En su momento llegó a tener 4.000 integrantes, pero tras los golpes de las autoridades su pie de fuerza ronda los 1.700 miembros, según el centro independiente de estudios para el desarrollo y la paz (Indepaz).
La Defensoría del Pueblo (Ombudsman) lamentó en un comunicado «el temor de las comunidades (…) donde se registran calles casi vacías, comercios cerrados, actividades escolares suspendidas, empresas de transportes paralizadas y la población confinada en sus viviendas».
Palacios ofreció una recompensa equivalente a 7.300 dólares para quienes den información sobre los responsables de ataques durante el paro armado.
De acuerdo a información del Ministerio de Defensa, los traficantes lanzaron además un plan para asesinar policías y militares.
El jefe de esa cartera, Diego Molano, anunció «la creación de un bloque de búsqueda especializado» para «desarticular» el Clan del Golfo.
Todavía no se conoce un balance oficial sobre víctimas civiles ni de la fuerza pública.
«Nuestro propósito es restaurar en horas la actividad comercial y la movilidad en el país», dijo el ministro de Defensa Diego Molano, desde el municipio de Carepa, en el departamento de Antioquia (noroeste).
AFP.