Al menos 24 personas murieron y ocho fueron declaradas desaparecidas tras el paso del ciclón Sitrang en el sur de Bangladés, donde un millón de personas fueron evacuadas en las regiones litorales más expuestas, informaron este martes las autoridades.
La mayor parte de las víctimas murieron por la caída de árboles, y dos, en el naufragio de un barco en el río Jamuna, en el norte del país, declaró a AFP Jebun Nahar, una responsable gubernamental.
«Todavía no hemos recibido todos los informes de daños» causados por el ciclón, precisó.
Ocho personas están desaparecidas en el golfo de Bengala, dijo a AFP el jefe del servicio regional de bomberos, Abdullah Pasha. Según él, se encontraban a bordo de un barco de dragado que volcó durante la tormenta el martes de madrugada, cerca del polígono industrial de Mirsarai, el más grande del país.
«Un fuerte viento hizo volcar la draga y esta se hundió inmediatamente en el golfo de Bengala», agregó el responsable. Un equipo de buzos está buscando a eventuales supervivientes, explicó.
El ciclón llegó a la isla de Bhola, en el sur del país, a las 21H00 del lunes (15H00 GMT) antes de degradarse en depresión el martes por la mañana, y continuar hacia el estado de Meghalaya, en el noreste de India, declaró Bazlur Rashid, un responsable del servicio meteorológico.
Fuentes de estos servicios temían que el ciclón provocara una marejada ciclónica de hasta tres metros de altura, un riesgo que por el momento no se ha materializado.
– Escuelas cerradas –
En la región de Barisal, la más afectada, las fuertes lluvias y vientos arrasaron muchos campos de cultivo, dijo Aminul Ahsan, administrador del distrito regional.
En el sur y el suroeste del país, las escuelas permanecieron cerradas.
Y en la capital, Daca, pese a encontrarse a centenares de kilómetros de la tormenta, el viento arrancó varios árboles.
El lunes, las autoridades evacuaron a «alrededor de un millón de personas» en las regiones costeras, islas y en zonas cercanas a ríos y las trasladaron a miles de refugios donde pasaron la noche, explicó el secretario del ministerio de Gestión de Catástrofes, Kamrul Ahsan.
Las autoridades tuvieron que convencer a algunos vecinos reticentes de irse de sus casas. El martes por la mañana, muchos habían vuelto a sus casas, agregó Ahsan.
– 10 millones de habitantes sin electricidad –
Cerca de diez millones de personas se quedaron sin electricidad en los quince distritos costeros del país desde el lunes, indicó un responsable del sector eléctrico.
En la isla de Maheshkhali, en el sur de Bangladés, el ciclón arrancó árboles y provocó cortes de electricidad y de las telecomunicaciones.
«Tanta era la potencia del viento que no pudimos dormir en toda la noche, por temor a que nuestras casas quedaran destruidas», contó el martes Tahmidul Islam, un vecino de Maheshkhali, de 25 años.
«En muchas casas entraron serpientes» y numerosas viviendas fueron inundadas, agregó el joven.
Unos 33.000 refugiados rohinyás en la isla de Bhashan Char, expuestos al temporal, en el golfo de Bengala, recibieron la orden de no salir y no se registró ninguna víctima, según las autoridades.
En la vecina India, en el estado de Bengala Occidental, miles de personas fueron evacuadas el lunes a centros de rescate, indicaron responsables. Según ellos, no se registraron daños y el martes la población pudo regresar a sus hogares.
Bangladés, con una población de 170 millones de habitantes, se encuentra entre los países más afectados por los fenómenos meteorológicos extremos desde inicios del siglo XXI, según la ONU.
Según los científicos, es probable que el calentamiento climático haga que los ciclones sean más intensos y más frecuentes en los países de Asia del sur con costas en el golfo de Bengala.
Entretanto, los procedimientos de evacuación también han mejorado gracias a previsiones meteorológicos más precisas.
En 2020, el ciclón Amphan, el segundo «superciclón» más fuerte de la historia en el golfo de Bengala, dejó más de 100 muertos y varios millones de damnificados en Bangladés e India.
AFP