El mediocampista Casemiro alertó de la dificultad que tendrá Brasil para vencer el sábado a Argentina en la final de la Copa América-2021, porque su potencial está más allá del talento de los goleadores Lionel Messi y Lautaro Martínez.
«Argentina no son solo Lautaro y Messi, no podemos hacer énfasis solamente en ellos dos. Son jugadores de gran calidad, jugadores del más alto nivel mundial. Pero si Argentina llegó a la final fue por el grupo, tenemos que respetar eso», dijo el volante del Real Madrid en declaraciones a periodistas divulgadas este jueves.
«Independientemente de la calidad de esos jugadores en el frente de ataque, hay que respetar a toda Argentina, con seguridad va a ser un gran juego y un desafío grande para nosotros», agregó.
Pieza fundamental para mantener el equilibrio de la ‘Seleçao’, Casemiro aseguró que Brasil siempre está «obligado a ganar» así tenga en frente a un futbolista de los quilates de Lionel Messi, máximo goleador de la Copa América con cuatro tantos, a quien advierte que intentarán neutralizar a base de juego colectivo.
Lautaro Martínez, por su parte, es el segundo mayor artillero del torneo, con tres goles.
«Messi es un jugador excepcional, de mucha calidad, por quien tengo mucho respeto por lo que ha hecho y sigue haciendo en el fútbol. Él va a defender la selección argentina, yo voy a defender la brasileña, cada uno va a intentar hacer lo mejor», señaló sobre un jugador al que ha enfrentado varias veces en los clásicos españoles entre el Real Madrid y Barcelona.
Casemiro, uno de los capitanes del Brasil de Tite junto a Thiago Silva y Marquinhos, aseguró que la final del sábado en el Maracaná se definirá por «detalles» y que la ‘Canarinha’ está preparándose para el bicampeonato de la Copa América ante su clásico rival.
«No podemos dejar de hablar que esto es una final. Después del juego contra Perú (en semifinales) dije que las finales no se juegan, se ganan. Con medio a cero nosotros somos los campeones, eso es lo más importante», señaló.
Brasil buscará su décimo título de Copa América, mientras que Messi apunta a su primer trofeo con la Albiceleste, luego de cuatro finales perdidas, tres de Copa América (2007, 2015, 2016) y una en el Mundial de 2014.