Las autoridades del estado de Minnesota mantienen un extenso operativo este sábado para localizar al principal sospechoso del asesinato de la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Melissa Hortman, y su esposo, Mark, en un hecho que ha sido calificado como un ataque políticamente motivado.
El presunto agresor, quien se habría hecho pasar por un agente de policía, también estaría vinculado al tiroteo contra el senador estatal John Hoffman y su esposa, Yvette, quienes resultaron heridos en su vivienda en Champlin, a pocos kilómetros del primer crimen.
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Según información preliminar, el sospechoso llevaba consigo panfletos relacionados con protestas contra el presidente Donald Trump, además de escritos donde figuraban los nombres de las víctimas y de otros legisladores.
Las fuerzas de seguridad desplegaron cientos de agentes en la zona norte de Minneapolis, donde se mantiene la alerta máxima ante la posibilidad de que existan más objetivos.
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El gobernador de Minnesota, Tim Walz, condenó el hecho y aseguró que se trata de un ataque contra la democracia. Mientras tanto, varios eventos públicos fueron suspendidos y se han emitido advertencias a otros funcionarios electos.