La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) adoptó la Resolución 80/2024, el 31 de octubre, mediante la cual otorgó medidas cautelares en beneficio de Jan Darmovzal, un ciudadano checo que tiene dos meses detenido por el régimen de Nicolás Maduro.
«Se alega que no se emitió ninguna orden de aprehensión, ni una investigación en contra del beneficiario. Así como que estaría incomunicado y que, a pesar de que el gobierno de República Checha y sus autoridades consulares requirieron información a Venezuela, no se ha dado a conocer en qué organismo de seguridad está detenido, ni se ha informado sobre su estado físico o psicológico”, indicó la CIDH en su comunicado.
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La organización indica que Darmovzal se encuentra en una situación de gravedad y urgencia de daño irreparable a sus derechos, pues desde el 5 de septiembre está detenido por funcionarios policiales del régimen de Maduro, pero que no se conoce en qué centro de reclusión está, tampoco conocen si existe alguna investigación penal que permita verificar la fiscalía o el tribunal que lleva el caso.
El régimen venezolano indicó que fue detenido por estar involucrado en un plan para atentar contra autoridades de la dictadura venezolana, pero tampoco hay elementos que indiquen que Venezuela haya mantenido comunicaciones con República Checa.
La CIDH pide a Venezuela informar si está bajo custodia de los cuerpos policiales y las circunstancias; además de si fue presentado, los delitos que se le imputan y a garantizar el derecho a la vida y a la integridad.