La Policía de Alemania desarticuló una red que operaba desde una pizzería en Düsseldorf al descubrir que distribuían cocaína, a través de su menú de pizzas tras meses de investigación.
El encargado de la investigación, Michael Graf von Moltke, explicó que los clientes sabían que con la pizza número 40 se distribuía droga, y que era una de las pizzas más pedidas, lo que llamó la atención de las autoridades y por lo que comenzaron las investigaciones.
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Los policías allanaron la vivienda del gerente de la pizzería, un hombre de 36 años que intentó botar una bolsa de drogas por la ventana, que cayó en manos de la policía. En ese momento incautaron 1,6 kilos de cocaína, 400 gramos de marihuana y 268 mil euros en efectivo.
El hombre fue liberado pero las investigaciones continuaron y pudieron desmantelar toda la organización y detuvieron a tres personas por la distribución de droga en la pizzería y otras 12 están bajo sospechas.