Judas Tadeo fue, según diversos textos neotestamentarios, uno de los discípulos de Jesús de Nazaret, que formaba parte del grupo de «los doce» apóstoles.
Es conocido en los Evangelios como «hermano de Jesús» y suele ser confundido con Judas Tadeo de Judas Iscariote, el apóstol a quien se le atribuye haber traicionado a Jesús.
También se le llama simplemente «Tadeo», o «Judas de Santiago», aunque la identificación entre «Tadeo» (en los Evangelios de Mateo y de Marcos) y «Judas de Santiago» (en el Evangelio de Lucas y en los Hechos de los Apóstoles) es discutida por los especialistas.
San Judas Tadeo de las causas imposibles
Sin importar cuál es el problema por el que esté pasando, tiene que saber que hay un santo muy poderoso que ansiosamente espera su llamada de auxilio. Incluso en este momento está dispuesto a ayudarlo sin importar si son imposibles de resolver.
Es un santo poco conocido que decido romper su silencio para escribir una breve carta, pero que contiene un mensaje poderoso sobre los desafíos de este tiempo.
San Judas Tadeo, el santo de las causas imposibles, de los desesperados.
Su imagen
La representa con una imagen de Cristo en el pecho por su parentesco con el Señor.
También lo asemejan con un mazo, debido a que, según cuentan, le dieron muerte con ese instrumento de un golpe en la cabeza, para luego cortarla con un hacha.
¿Por qué una Oración de agradecimiento a San Judas Tadeo?
Estas oraciones suelen hacerse porque es la mejor forma de agradecerle a San Judas Tadeo que haya solucionado nuestros problemas, es una forma de agradecer con palabras, diciendo de forma sincera y de frente lo bien que nos sentimos por la ayuda recibida.
Para agradecerle a San Judas Tadeo por los favores recibidos, puede hacerse de muchas maneras y de acuerdo con las posibilidades que tenga cada quien, pero este agradecimiento debe ser sincero, debe salir desde el corazón, con amor y con sentimiento. La mejor forma de hacerlo es con una oración que salga del alma.
Oración de agradecimiento a San Judas Tadeo
Sagrado patrono San Judas Tadeo, mi cielo ha vuelto a ver las estrellas por tu divina gracias. Acudo a ti con júbilo y con un corazón palpitante de emoción porque me has regresado la fe y las ganas de vivir. Agradezco la ayuda que me has dado y soy testigo de tu gran bondad.
San Judas Tadeo, gracias a ti la vida me ha dado una nueva oportunidad.
Me encuentro conforme y agradecido con lo que me has regalado y cada día que pasa cuando despierto recuerdo tu gran bondad. Cuando duermo, me entrego a ti en cuerpo y mente, con la intensión de que me protejas en el mundo de los sueños, en donde no controlo mi ser.
Como el buen agricultor que eres, elimina de mi camino las malas hierbas y déjalo limpio para mí. Como el buen doctor que eres, has sanado mis heridas físicas y del alma. Me entrego a ti, porque quiero sentir la luz que brilla en mi desde ya y para toda la vida.
Con esta oración quiero darte las gracias por haberme ayudado a ser una mejor persona, a partir de hoy mi vida estará destinada a hacer el bien a todos mis semejantes, evitando primero que el mal de la envidia anide en mí ser. Te agradezco cada día por la protección que me das. Te prometo que, con mis acciones, ayudare a todo aquel que se encuentre necesitado y requiera de mi ayuda y no dañar a nadie con mis pensamientos.
Gracias San Judas Tadeo por todos los favores que he recibido, hoy gracias a ti he vuelto a nacer. A partir de hoy, me pongo en tus manos, para que me cuides y guíes mis pasos. En el nombre de Dios, Amen.