Los rebeldes sirios aseguraron estar rodeando Damasco con el fin de derrocar al dictador Bashar al Assad, mientras que el régimen indicó que no se han retirado ni han abandonado la capital del país.
“Nuestras fuerzas han comenzado la fase final de cercar la capital, Damasco”, afirmó el comandante rebelde Hasan Abdel Ghani, que forma parte de la alianza liderada por el grupo islamista radical Hayat Tahrir al Sham (HTS).
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Por su parte, el ejército sirio reforzó sus posiciones en la provincia de Rif Damasco para evitar incidentes, para evitar que «los terroristas» están tratado de crear caos a través de sus plataformas y herramientas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que “ciudadanos se manifestaron en la ciudad de Jaramana en Damasco, coreando consignas contra el régimen sirio y su familia, y derribaron la estatua de Hafez al Asad en la ciudad”.