Starbuck finalmente cedió a la presión pública y suspendió sus actividades en Rusia como rechazo a la invasión de Ucrania.
Starbucks también anunció el cierre temporal de sus 130 cafés en Rusia, que pertenecen a un conglomerado kuwaití.
El grupo kuwaití que posee la licencia para operar en el país, «aceptó suspender inmediatamente las operaciones en las tiendas y ofrecerá apoyo a cerca de 2.000 empleados que dependen de Starbucks para vivir», dijo el director general de la cadena, Kevin Johnson, en un mensaje.
En total, más de 280 grandes empresas con una presencia importante en Rusia han anunciado su retirada, según un inventario actualizado de la Universidad de Yale. Una treintena de multinacionales sigue en el país.
El promotor de este listado, el profesor de gestión Jeffrey Sonnenfeld, subraya el papel que jugó en el caída del régimen racista del Apartheid la salida de 200 grandes grupos en Sudáfrica en la década de 1980.
Con información de AFP.