Sin recursos para alargar su estadía, unos 3.000 turistas ucranianos quedaron varados en República Dominicana víctimas de las restricciones aéreas aplicadas luego de la invasión rusa a ese país, informaron representantes consulares.
«Los ucranianos ahora mismo necesitan de la ayuda de República Dominicana, necesitan dinero, necesitan ropa, necesitan muchas cosas», dijo entre lágrimas la cónsul honorífica de Ucrania, Ilona Oleksandrivna, durante una rueda de prensa en Santo Domingo.
Oleksandrivna señaló que, de los 3.000 viajeros, al menos unos 1.200 han sido sacados de los hoteles donde pasaban sus vacaciones por no tener dinero para prolongar su estadía en el país de playas de ensueño que recibió en 2021 unos 5 millones de turistas, el doble que en 2020.
«Tenemos ahora mismo turistas en la calle (…) Los hoteles los han sacado por no tener cómo pagar», afirmó.
Carlos Mesa, asesor migratorio de la cónsul, confirmó que en República Dominicana hay más de 3.000 ucranianos imposibilitados de regresar a su país, y en algunos casos los seguros de estos turistas no les cubren la estadía por una situación de guerra.
Sin recursos para ayudar a sus compatriotas, Oleksandrivna pidió una reunión con el presidente dominicano, Luis Abinader, para exponer la situación.
«Ucrania quiere una cita con el presidente Luis Abinader, por favor, deme una cita ahora mismo», clamó.
El ministro de Turismo dominicano, David Collado, informó que sostendría una reunión con el sector privado para abordar el tema de estos viajeros.
El funcionario aseguró que el gobierno dominicano «va a reaccionar con responsabilidad y con sensibilidad humana».
La asociación de transportistas turísticos dominicanos (Adotratur), que congrega a unas 39 empresas dedicadas al traslado de turistas, ofrecerá traslados gratuitos tanto a ucranianos como a viajeros rusos afectados por la guerra, indicó en un comunicado.
Como represalia por la invasión, los 27 miembros de la Unión Europea anunciaron el domingo por la noche el cierre de sus espacios aéreos a las compañías y aeronaves rusas. Las sanciones a Rusia han escalado conforme pasan los días.
En respuesta, Rusia cerró, «salvo con permiso especial», su espacio aéreo a compañías de 36 países europeos y Canadá, lo que complica la situación de miles de viajeros regados por el mundo.
El país, con sus paradisíacas playas y complejos hoteleros, es uno de los pocos que ha mantenido abiertas sus fronteras desde el inicio de la pandemia.
En enero pasado llegaron vía aérea 13.749 turistas procedentes de Ucrania, mientras que en todo 2021 ingresaron 85.912, según datos del Banco Central.
AFP.