El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, pidió reconocer el «genocidio» supuestamente perpetrado por las tropas rusas luego de que cientos de cadáveres fueran encontrados cerca de Kyiv, provocando duras condenas y llamados a intensificar las sanciones contra Moscú.
«Son crímenes de guerra y serán reconocidos como genocidio», dijo Zelenski a los medios desde Bucha, una localidad al noroeste de la capital donde el fin de semana se descubrieron cadáveres de civiles, algunos con las manos atadas detrás de la espalda.
«Ustedes están aquí hoy y ven lo que ha pasado. Sabemos que miles de personas han sido asesinadas y torturadas con las extremidades cortadas, las mujeres violadas, los niños asesinados», dijo, vestido con un chaleco antibalas.
Rusia negó su responsabilidad y sugirió que las imágenes eran montajes. Es una «atroz provocación de radicales ucranianos», reaccionó el embajador adjunto de Rusia ante Naciones Unidas.
Pero Estados Unidos dijo que buscará la suspensión de Rusia del Consejo de Derechos Humanos del organismo internacional y el presidente Joe Biden abogó por un «juicio por crímenes de guerra».
Washington y sus aliados anunciarán «esta semana» nuevas sanciones económicas contra Rusia, anunció este lunes el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Según este funcionario, se estudia posibles medidas «relacionadas con la energía».
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, «horrorizada» por las imágenes de Bucha, pidió que se preservaran todas las pruebas.
En esa línea, la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que la UE está dispuesta a enviar equipos de investigadores a Ucrania.
La ministra canadiense de Asuntos Exteriores, Mélanie Joly, denunció el lunes «crímenes de guerra» en Bucha, y advirtió que Canadá impondrá nuevas sanciones «dentro de poco».
– «Enterramos a todos» –
Las tropas ucranianas al recuperar Bucha descubrieron decenas de cadáveres esparcidos en las calles.
Los cadáveres de cinco hombres con las manos atadas fueron encontrados en un sótano de un centro sanitario infantil de Bucha, informó el lunes la fiscalía general de Ucrania en un comunicado en Telegram.
«En el sótano de uno de los sanatorios infantiles, la policía encontró los cadáveres de cinco hombres con las manos atadas», indicó el comunicado. «Los soldados de las fuerzas armadas rusas torturaron y mataron a civiles desarmados», añade el texto.
El comunicado iba acompañado de fotografías que muestran los cadáveres y la oficina de la fiscal Irina Venediktova indicó que se abrió investigación.
Venediktova, había señalado antes que se habían recuperado los cuerpos de 410 civiles.
El alcalde de Bucha, Anatoly Fedoruk, dijo a AFP que 280 cadáveres fueron llevados a fosas comunes porque era imposible enterrarlos en los cementerios que están al alcance de los disparos.
La firma de imágenes satelitales Maxar presentó fotos que indicó son de una fosa común en el predio de una iglesia local.
El trabajador municipal Serhii Kaplychnyi dijo a AFP que las fuerzas rusas inicialmente se negaron a permitir a los pobladores enterrar a los muertos en Bucha.
«Dijeron que mientras hiciera frío los dejáramos allí», sostuvo. Cuando finalmente pudieron recuperar los cuerpos, «cavamos una fosa común», contó.
Ucrania también acusó a Rusia de «tratos inhumanos» a los prisioneros de guerra.
– Mariúpol destruida –
Rusia indicó hace unos días que se centraría en el este de Ucrania y ha redoblado sus esfuerzos en el sur.
En esa zona están ciudades portuarias claves para crear un enlace terrestre entre la península de Crimea -anexada en 2014 por Rusia- y las regiones separatistas prorrusas de Donetsk y Lugansk.
En Mariúpol, asediada y bombardeada desde hace un mes por el ejército ruso, el 90% de la ciudad quedó destruida, informó su alcalde, Vadim Boichenko.
«Unas 130.000 personas» siguen atrapadas en la ciudad, que sufre carencias de alimentos, agua y electricidad.
«Planeamos evacuar los habitantes que quedan, pero no podemos hacerlo hoy», por los bombardeos «incesantes», lamentó.
En el este, particularmente en el Donbás controlado por Ucrania, la situación es «tensa», dijo el gobernador de la región.
El ejército está listo para enfrentarse a las fuerzas rusas y la población civil debe evacuar sin tardar, admitió Pavlo Kyrylenko, en una rueda de prensa en Kramatorsk.
En esta ciudad, mujeres, niños y ancianos abordaron el fin de semana trenes para salir de la región.
«El rumor es que viene algo terrible», comentó Svetlana, una voluntaria que organizaba a la multitud en la plataforma de la estación.
El peor conflicto en décadas en Europa, causado por la invasión rusa del 24 de febrero, ha dejado 20.000 muertos, según cifras ucranianas.
El enviado humanitario de la ONU, Martin Griffiths, debe llegar a Kiev tras visitar Moscú el domingo en un intento de frenar los combates.
En tanto, las conversaciones de paz deben reanudarse por video el lunes, aunque el negociador ruso Vladimir Medinsky dijo que es muy pronto para una reunión entre Zelenski y Putin.
– Nuevas sanciones –
Mientras tanto la UE comenzó a debatir con «urgencia» este lunes una nueva ronda de sanciones contra Moscú, indicó el jefe de la diplomacia europea Josep Borrell.
El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que había «indicios muy claros de crímenes de guerra» en Bucha y en una entrevista en la radio francesa, afirmó que las medidas podrían apuntar el sector del petróleo y carbón ruso, pero se abstuvo de mencionar el gas, tema que divide a los europeos.
«Tenemos que plantearnos sanciones duras, pero a corto plazo el suministro de gas ruso no es sustituible», dijo por su lado el ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner. Interrumpirlo «nos perjudicaría más a nosotros que a Rusia», agregó.
AFP.