China registró este lunes más de 2.000 nuevos casos positivos de covid-19, su cifra más elevada en el último mes, a pocos días del inicio de un importante congreso en Pekín del Partido Comunista de China (PCC), lo que mantiene en alerta a las autoridades.
El partido gubernamental celebrará en la capital china, a partir del domingo, un congreso quinquenal clave en el que se prevé que el presidente Xi Jinping logre un inédito tercer mandato.
Ante esta importante cita, las autoridades endurecieron las restricciones sanitarias en todo el país para evitar imprevistos.
En Shanghái, decenas de miles de personas se encontraban confinadas el lunes. El fin de semana, varios barrios de la capital económica del país fueron puestos en cuarentena después de que el viernes se detectaran 23 casos positivos.
China es la última gran potencia económica que mantiene una estrategia sanitaria de «cero covid», lo que implica el confinamiento de personas contaminadas, y pruebas PCR generalizadas y obligatorias para acceder a lugares públicos.
En Xianjian (noroeste), las autoridades han prohibido los desplazamientos internos.
En Shanghái, la población teme la vuelta de nuevas medidas más radicales.
En primavera, las autoridades habían confinado sin previo aviso a los 25 millones de habitantes de la metrópolis.
Algunos habitantes de Pekín que salieron la ciudad por la fiesta nacional del 1 de octubre declararon desesperados en redes sociales que no se les ha permitido entrar de nuevo, pese a haber viajado a zonas sin restricciones sanitarias.
En las últimas semanas, el país está registrando rebrotes de la epidemia, especialmente en Mongolia Interior (norte).