El Atlético de Madrid sufrió para ganar 2-1 al colista Almería este domingo en la 16ª jornada del campeonato español y subirse al podio liguero, antes de medirse en Champions a la Lazio el miércoles por el liderato de grupo.
Los rojiblancos mantuvieron hundido en el fondo de la tabla a Almería con los goles de Álvaro Morata (17) y del argentino Ángel Correa (22), anulando la reacción del brasileño Leo Bapstistao (62).
Los rojiblancos, que venían de una dura derrota con el Barcelona (1-0), acabaron sufriendo ante el Almería, que fue creciendo con el paso de los minutos.
El Atlético acabaría imponiéndose impulsado por un Antoine Griezmann, elegido mejor jugador del encuentro, que estuvo en el origen de los tantos locales.
El delantero francés también vio puerta, pero su tempranero gol (6) fue anulado por el VAR por un ajustado fuera de juego.
Griezmann, segundo máximo goleador del campeonato con nueve goles, a cuatro del inglés del Real Madrid, Jude Bellingham, que encabeza la lista, está a sólo tres goles de igualar al mítico Luis Aragonés como máximo goleador histórico del conjunto rojiblanco.
El Atlético ahogó en el inicio del encuentro al Almería, al que le costaba un mundo salir de su campo, para encarrilar el partido en apenas veinte minutos.
Te puede interesar: Los Globos de Oro revelarán sus nominaciones
Morata abrió el marcador al aprovechar un pase de Griezmann para batir al portero Maximimiano en su salida (17).
Apenas cinco minutos después, Griezmann volvió a combinar con Marcos Llorente que dejó un balón en boca de gol para la llegada de Correa (22).
El tanto fue una liberación para el argentino, que llevaba diez partidos oficiales sin ver puerta.
Con el marcador a favor, el Atlético se vino un poco atrás, dejando al Almería respirar y llegar más aunque sólo un disparo cercano de Adrián Embarba (45+1) puso en aprietos al portero Jan Oblak.
El Almería mostró una clara mejoría en los primeros minutos del segundo tiempo presionando arriba e incomodando al Atlético hasta encontrar el tanto.
Un disparo de Alejandro Pozo dio en Baptistao, obligando a estirarse a Oblak, pero el rechace lo remató el propio Baptistao al fondo de la portería rojiblanca (62).
El gol puso presión en el Atlético, que multiplicó las imprecisiones, mientras un Almería valiente siguió apretando y poniendo en apuros a Oblak, convertido en uno de los héroes de su equipo.
En un final de partido loco, el Atlético aguantó para llevarse el encuentro y ponerse en la tercera plaza de La Liga, por delante del Barça que cerrará el día contra el Girona.
AFP