Este domingo, el diario regional La Provence informó que la mayoría de invitados iba sin mascarillas y que la entrada al evento costaba 150 euros para dos personas.
Aproximadamente unas 500 personas fueron desalojadas el sábado, luego de que asistieran a una fiesta de manera ilegal en Marsella (sudeste de Francia).
La mayoría de los asistentes no portaban mascarilla, pese a que el país sigue limitado por las medidas de confinamiento y las autoridades sanitarias registran más de 13.000 contagios diarios.
«Una investigación está en marcha para identificar a los propietarios y organizadores que tendrán que responder por sus actos» indican las autoridades locales.
El diario regional La Provence, que adelantó la noticia, señaló que la mayoría de invitados iba sin mascarilla y que la entrada al evento costaba 150 euros para dos personas, con una botella de alcohol incluida en el precio.
La fiesta duró varias horas, desde medianoche hasta las 4:00 hora local.
Por su parte el secretario departamental del sindicato policial Alliance Police Nationale, Rudy Manna, detalló que en la cadena BFM TV que la sala tenía capacidad para entre 150 y 200 invitados.
La Policía interpuso «numerosas multas» de 135 euros por romper las medidas del confinamiento, y requisó bebidas alcohólicas y estupefacientes.
El número de actividades de este tipo en el país han aumentado a medida que las restricciones son más fuertes.