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Abogado colombiano exiliado en Francia publica tercera serie de serie «Matarife»

El abogado colombiano Daniel Mendoza, refugiado en Francia tras recibir amenazas de muerte, prepara la tercera temporada de la serie documental «Matarife», que denuncia el «sistema narco paramilitar» en su país.

«En Colombia, tenemos un gobierno paramilitar y narcotraficante» declara Mendoza a la AFP cerca de la ciudad de Toulouse (sur).

«Matarife» ha sido visionada 40 millones de veces en las redes sociales.

«La serie la hice como un arma de la subversión (…) que pretende herir de muerte ese sistema, sin generar sangre», indica.

Abogado, criminólogo y periodista, Mendoza tuvo que huir de su país poco después de la emisión, en mayo de 2020, de la primera temporada de la serie.

Mediante el uso de artículos de prensa, entrevistas, fotos, videos y dosieres judiciales, la serie traza los vínculos entre la élite políticoeconómica, los paramilitares y los narcotraficantes, y acusa directamente al expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).

«El cártel de Medellín nunca hubiera sido lo que fue si Álvaro Uribe, entonces director de la Aviación Civil (…) no les hubiera dado las licencias a Pablo Escobar, al clan de los Ochoa (…) para que los aviones subieran llenos de coca y bajaran llenos de dólares», asegura.

Mendoza traza las conexiones con hilo rojo sobre un vasto mural de imágenes y escritos, en su apartamento.

«La finalidad de la serie es usar la información que ya existía (…) empaquetar esa arma en un blindaje de plomo audiovisual (…) para que le llegue al alma de la gente y la despierte (…) mejor que lo hubiera hecho un documental convencional», explica.

Difundida en YouTube, con un formato ágil y con música, la serie (diez episodios de seis a ocho minutos cada uno) está pensada para ser vista rápidamente, «entre dos estaciones de bus».

Daniel Mendoza, nacido el 8 de abril de 1972 en el seno de una familia acomodada, considera que «a Colombia la manejan sociópatas».

Una victoria de la izquierda en las próximas elecciones no provocará su regreso. «Los que me quieren matar, todavía estarán», asegura.

«De pronto en diez, veinte años pueda volver y caminar tranquilo por las calles de este país que adoro», concluye.

AFP