El testaferro de Nicolás Maduro, Alex Saab de ciudadanía colombo-venezolana fue acusado de los delitos de operaciones financieras ficticias por parte de la Fiscalía General de Colombia.
Ante un juez especializado de Barranquilla, la Fiscalía General acusó a Saab, quien está detenido en una cárcel de Cabo Verde, a la espera de una extradición a Estados Unidos que estaría en la etapa final.
La acusación recae además sobre Devis José Mendoza Lapeira, contador de una de sus empresas, ambos por los delitos de presuntas maniobras financieras ilícitas que representaron pérdidas al Estado.
Según la Fiscalía, esas movidas irregulares fueron auspiciadas por el contador Mendoza Lapeira, quien, supuestamente, usó su oficio para «ocultar, transformar y administrar las diferentes actividades ilegales».
Entre las pruebas, el organismo verificó, por ejemplo, que la sociedad tuvo un crecimiento inusual del 923 por ciento en el 2007, subida desproporcionada si se tiene en cuenta que entre 2004 y 2006 tuvieron pérdidas y los ingresos habían caído un 33 por ciento.
En su investigación, la Fiscalía también encontró que la empresa Shatex S.A. habría sido el eje de todos los movimientos ilegales de Saab y su contador, encontrando varias irregularidades, destacando esa sociedad como una “empresa de papel”.
De hecho, presuntamente, en 2011 la compañía canalizó la salida de más de 2.000 millones de pesos al exterior por el sistema de cambio colombiano, pero estas actividades no fueron declaradas.