Álex Saab, presunto testaferro del dictador Nicolás Maduro, estaría siendo investigado junto a su socio Álvaro Pulido, por el FBI, debido a presuntas actividades de narcotráfico llevadas a cabo bajo el paraguas del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP), uno de los «programas sociales» del régimen venezolano.
El medio Noticias Caracol afirma que tiene evidencias que demuestran que el CLAP fue usado por Saab para un negocio de envío de cocaína desde Venezuela a México y ‘blanquear’ las ganancias ilegales. Al parecer, la droga sale a México en aviones de la Fuerza Aérea Bolivariana, específicamente C-130 Hércules y Shaanxi y-8, los cuales despegan de la base aérea La Carlota, en Caracas.
Según un informe, la droga era descargada en Veracruz, México, y los aviones llenados con los alimentos que se distribuirían mediante el CLAP, en muchos casos comida vencida, en mal estado y de mala calidad. Los aviones supuestamente volvían a Venezuela y llegaban a Puerto Cabello, y La Guaira.
Algunas cajas CLAP eran almacenadas en bodegas de la Gran Misión de Abastecimiento Soberano, cuya administración estaba en cabeza de militares retirados adeptos al régimen y sobre quienes hay señalamientos por sus presuntos vínculos con narcotráfico y tráfico de combustible, según reveló una investigación estadounidense.
En las bodegas, los productos eran cambiados para luego revenderlos a un precio mayor. El programa CLAP debía llegar cada 15 días a los hogares venezolanos, pero en realidad llegaba cada tres meses.
Con información de Diario de Las Américas.