Hasta 40 grados deben soportar los habitantes del país asiático en medio de una ola de calor que ha sorprendido a los japoneses.
Los registros de las autoridades médicas contabilizan 10 mil personas quienes han tenido que ser hospitalizadas por afecciones relacionadas con el inclemente calor.
Las alarmas permaneces activas. Según datos del Departamento de Bomberos de la capital nipona, más de 3 mil llamadas se han atendido desde que comenzó la ola de calor.
La insolación y el agotamiento son los principales síntomas. El pasado martes, un niño de 6 años falleció luego de participar en una clase al aire libre en su escuela, lo que llevó al Ministerio de Educación a instar a las juntas educativas locales y a las universidades de todo el país tomar medidas para prevenir casos similares.