El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, prolongó por un año el decreto que califica a Rusia como amenaza para la seguridad de su nación.
La administración Biden le solicitó al Congreso la extensión de esta medida, que se revisa cada año, dado el peligro que supone para Estados Unidos la situación en el país.
Asimismo, detalla como peligrosos los “intentos de socavar las elecciones libres, justas y demócratas, así como las instituciones democráticas estadounidenses y de sus aliados; facilitar y participar en actividades maliciosas en materia de ciberseguridad; promover y utilizar corrupción transnacional para influenciar a gobiernos extranjeros, llevar a cabo acciones extraterritoriales que atacan a disidentes o periodistas, socavar la seguridad de países y regiones importantes para la seguridad estadounidense, y violar la ley internacional, incluyendo no respetar la integridad territorial de los estados”.
“He determinado que es necesario continuar con la emergencia nacional declarada en la Orden Ejecutiva 14024 con respecto a las actividades extranjeras dañinas específicas del Gobierno Rusia”, expresó Biden en una carta dirigida al presidente de la Cámara de Representantes estadounidense.
El pasado 01 de febrero Estados Unidos sancionó a veintidós individuos y organizaciones por ayudar a la industria de defensa de Rusia a evadir las sanciones de Washington, en medio de la guerra en Ucrania.
El Departamento del Tesoro explicó en un comunicado que los sancionados han apoyado a Rusia en el terreno militar para esquivar las sanciones impuestas contra sus autoridades, reseñó EFE y Europa Press.