El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció el jueves que acusó a Boeing de complot para cometer un fraude por no haber facilitado toda la información del proceso de aprobación del 737 MAX, su modelo que sufrió dos accidentes mortales.
La AF ha informado que el gigante aeronáutico aceptó pagar más de 2.500 millones de dólares por saldar ciertas demandas, entre ellas una multa penal de 234 millones de dólares, 1.700 millones de dólares a sus clientes y 500 millones de dólares para un fondo destinado a indemnizar a los parientes de las víctimas de los accidentes de Lion Air en octubre de 2018 y de Ethiopian Airlines en marzo de 2019.