Canadá anunció el lunes en su presupuesto un nuevo objetivo de reducción de las emisiones de carbono a un 36% para 2030 con respecto a los niveles de 2005, a la vez que intensificó sus esfuerzos para llegar a las cero emisiones a mediados de siglo.
El nuevo objetivo climático -que supera el recorte del 30% fijado en el Acuerdo de París- está respaldado por miles de millones de dólares en nuevos fondos para ayudar a las empresas canadienses a reducir sus emisiones de CO2, así como a desplegar tecnologías de captura y almacenamiento de carbono y a cambiar al combustible de hidrógeno.