La capital de Venezuela arriba este miércoles a sus 451 años de fundación. La historia nos remonta a 1567, cuando Diego De Losada llegó al valle de Caracas y la bautizó con el nombre de Santiago de León de Caracas.
Debido al clima y a su efectiva defensa contra los piratas permite que la ciudad experimente un gran crecimiento, convirtiéndola 10 años después de su fundación en cabeza de la provincia, momento en el que Juan de Pimentel, uno de los primeros gobernadores de la Provincia de Venezuela, la hace su residencia, cuando llega a Venezuela en 1576.
Esta decisión dio pie al tercer cambio de la capital administrativa de la provincia de Venezuela; de Coro en la costa occidental, a El Tocuyo en 1545, y después a Caracas en 1578, hasta la actualidad.
Hoy, sumida en el abandono y la desidia del desgobierno que ostenta, la ciudad de Caracas no parece tener mucho que celebrar. Basura, deficiencia en los servicios públicos básicos, inseguridad y escasez son algunos de los problemas que viven los habitantes de la que en otrora fuera una de las urbe más importante de Latinoamérica.
En los últimas semanas la capital venezolana ha sido invadida por decenas de protestas en cada esquina. Más de 30 manifestaciones de calles se han llegado a registrar en un solo día, según algunas ONG´S que mantienen el monitoreo constante.
Escenario de épicas protestas la ciudad de Caracas, arropada por el hermoso Cerro El Ávila, esconde infinidades de historias y cuentos urbanos que a más de un extranjero mantiene enamorado de esta tierra.
Cuna de El Libertador de las Américas, Simón Bolívar, hoy se cierne sobre ella un sinfín de obstáculos que parecen no dejarla seguir creciendo, sumado a la desolación que dejan quienes se han ido, dejando todo atrás, la Caracas alegra y colorida, parece no ser la misma de ayer.