Las mascotas regresaron a la Casa Blanca. Champ y Major, los dos pastores alemanes que pertenecen al presidente Joe Biden y a su esposa, Jill Biden, arribaron este domingo a Washington D.C.
Según lo explicó Michael LaRosa, secretario de prensa de la primera dama, los canes llegaron a la capital estadounidense días después de la toma de posesión efectuada el 20 de enero, pues sus propietarios “querían instalarse” antes de que los perros se mudaran a la residencia presidencial.
De acuerdo con LaRosa, “Champ está disfrutando de su nueva cama para perros junto a la chimenea y a Major le encanta correr por el jardín sur”. El primero de esos animales tiene más de 10 años junto a la familia Biden. Major, entretanto, fue adoptado en noviembre de 2018, tras ser rescatado y ubicado en un refugio.
La entrada de los pastores alemanes a la Casa Blanca supone otra ruptura con las prácticas y políticas de Donald Trump. El ex mandatario pasó a la historia por ser el primer presidente estadounidense que no tuvo una mascota, en más de un siglo.