A través de un comunicado, la cancillería de China admitió haber encontrado “dificultades para permitir la asistencia de los representantes del Presidente (E) de Venezuela, Juan Guaidó” a la reunión anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En la misiva, Pekín justificó su decisión alegando que “Guaidó no ha sido elegido presidente a través de procedimientos legales y, por tanto, carece de legitimidad”, y “a pesar de que el gobernador designado por Guaidó ha superado las votaciones del BID”.
También rechaza la cancelación de la reunión anual del organismo, luego de la denegación del visado a Ricardo Hausmann, el representante de Guaidó ante el BID. “Ciertos países han tratado de imponer sus ideas sobre otros, manipular la cuestión venezolana y forzar la participación de los representantes de Juan Guaidó en la reunión sin tener en cuenta el objetivo del encuentro”, reza el texto de la cancillería china.