La nueva reforma migratoria ofrecida por el Presidente Joe Biden, incluye un camino a la ciudadanía para la mayoría de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que viven en el país.
La regularización incluye tres fases:
- Fase 1. Los inmigrantes elegibles podrán solicitar una residencia temporal por un período de cinco años;
- Fase 2. Al término de ese plazo podrán acceder a la residencia legal permanente (LPR), también conocida como tarjeta verde (Green Card); y
- Fase 3. Tres años después de recibir la LPR calificarán para tramitar la ciudadanía estadounidense por naturalización.
La iniciativa apunta a que los jóvenes indocumentados que entraron al país antes de cumplir 16 años y que se conocen como dreamers, titulares de TPS (‘Estatus de Protección Temporal’) y ciertos trabajadores agrícolas accedan inmediatamente a la ‘Green Card’ y tres años más tarde califiquen para la naturalización.
Pero no todos los indocumentados que viven en el país califican para regularizar sus permanencias. El proyecto de ley, que está en manos de ambas cámaras del Congreso, advierte que ciertos extranjeros sin papeles que han cometido faltas y tienen determinados antecedentes, no podrán obtener los beneficios del plan.
Fuente Miami Mundo