Un alto funcionario de bomberos de Miami-Dade informó este sábado a familiares de personas desaparecidas entre los escombros de un edificio de condominios derrumbado que los trabajadores de demolición planeaban derribar el resto del edificio el domingo.
Las preocupaciones se intesificaron durante la semana pasada de que la estructura dañada podría derrumbarse por sí sola, poniendo en peligro a las cuadrillas de abajo y complicando la búsqueda de víctimas.
El asistente de bomberos, jefe de bomberos, Raide Jadallah, expresó a los miembros de la familia durante una sesión informativa matutina que el edificio sería derribado “lo antes posible. Mañana a primera hora «.
Pero advirtió que «puede haber algunos contratiempos». Se llevará a cabo una reunión de seguimiento por la tarde para ultimar los detalles de la demolición, que podría ser una operación precaria ya que los expertos ingresan al edificio para perforar la estructura e instalar explosivos.
Las preocupaciones de que la parte aún en pie pudiera caer han reducido la búsqueda en áreas cercanas a esa sección, y los cambios detectados por los monitores el jueves temprano provocaron una suspensión de 15 horas de toda la búsqueda hasta que los ingenieros determinaron que era seguro reiniciar el sitio.
Jadallah indicó que los restos del edificio demolido se retirarían inmediatamente después con la intención de dar acceso a los rescatistas por primera vez a partes del área del garaje que es el foco de la búsqueda. Dicho acceso podría brindar a los funcionarios una imagen más clara de los vacíos que podrían existir entre los escombros y posiblemente albergar a sobrevivientes.
Nadie ha sido rescatado desde las primeras horas después del colapso del 24 de junio. El acercamiento del huracán Elsa desde el mar Caribe también genera preocupaciones de que los fuertes vientos posibles en el sur de Florida para el domingo por la noche o el lunes temprano podrían desestabilizar aún más la parte en pie de las torres.