Las pérdidas económicas causadas por las catástrofes naturales en el mundo durante el primer semestre de 2022 alcanzaron los 72.000 millones de dólares, según una primera estimación publicada el martes por la reaseguradora Swiss Re.
Aunque esta cifra es inferior a la del mismo periodo en 2021 (91.000 millones de dólares), el grupo suizo hizo hincapié en el peso cada vez mayor de los llamados desastres secundarios –menores que las grandes catástrofes como los huracanes o los terremotos–, cada vez más caros, según un comunicado.
«Los efectos del cambio climático son evidentes en los cada vez más numerosos fenómenos meteorológicos extremos, como las inundaciones sin precedentes en Australia y Sudáfrica», dijo Martin Bertogg, director de la cobertura de catástrofes en Swiss Re.
«Esto confirma la tendencia que observamos desde los últimos cinco años, que los desastres secundarios generan pérdidas en los seguros en cada rincón del mundo», agregó.
Las tormentas invernales de febrero en Europa costaron 3.500 millones de dólares a las compañías de seguros, según estimaciones de Swiss Re, el grupo que cumple el papel de asegurador de las aseguradores.
La factura por las inundaciones en Australia tras las lluvias torrenciales de febrero y marzo fue de 3.500 millones de dólares «por el momento», precisó la empresa.
AFP