Un encuentro de la tercera división de fútbol de Alemania fue parado este domingo tras los insultos racistas lanzados por un espectador contra un jugador del equipo visitante.
El enfrentamiento del Duisburgo en Osnabrück fue suspendido a la media hora de juego debido a las agresiones vertidas contra el delantero Aaron Opoku.
«Opoku sufrió insultos racistas. Increíble. ¡¡¡ Aaron, estamos contigo!!! LOS NAZIS, FUERA», tuiteó el club de Osnabrück.
Se escucharon gritos de mono provenientes desde las gradas cuando el jugador se acercó a un córner, explicó el árbitro del partido, Nicolas Winter.
El colegiado invitó a los jugadores a marcharse al vestuario para atender al jugador después de ver «lo conmocionado que estaba». «Le dije que estábamos para protegerlo», declaró Winter.
El aficionado que profirió los insultos fue identificado y expulsado del estadio, al mismo tiempo que el Duisburgo se disculpó.
En su cuenta de Twitter, el club anfitrión confirmó que el partido había sido interrumpido porque «Osnabrück ya no podía jugar».
«Lo entendemos completamente. Una tarde amarga para el fútbol en #Duisburg», agregó.
Mientras los equipos regresaban a los vestuarios y antes del anuncio de la suspensión del partido, muchos seguidores corearon: «Los nazis, fuera». Además, se escuchó la canción antifascista «Schrei nach Liebe» («Un llamado al amor») en los alrededores del estadio.