Estados Unidos condenó el sábado «enérgicamente» el lanzamiento de un misil balístico intercontinental (ICBM) norcoreano que, según Japón, cayó en sus aguas territoriales.
«Este lanzamiento aumenta innecesariamente las tensiones y corre el riesgo de desestabilizar la seguridad en la región», alertó una portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson.
Estados Unidos tomará «todas las medidas necesarias» para garantizar su seguridad y la de sus aliados Corea del Sur y Japón, agregó.
El lanzamiento del sábado, el primero de Pyongyang en siete semanas, tiene lugar días antes de que Seúl y Washington comiencen ejercicios militares conjuntos destinados a mejorar su respuesta en caso de un ataque nuclear de Corea del Norte.
Watson dijo que el disparo del ICBM «constituye una violación flagrante de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU».
Según Tokio, el misil cayó en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Japón.
Las tensiones militares en la península de Corea aumentaron el año pasado después de que Corea del Norte calificó su condición de potencia nuclear como «irreversible» y llevó a cabo pruebas de armas casi todos los meses, incluido el lanzamiento de misiles balísticos intercontinentales.
AFP