Por medidas de seguridad la administración Trump ha decidido evacuar del país centroamericano a gran parte de su personal diplomático. A partir de ahora sólo permanecerán en suelo nicaragüense el embajador y algunos funcionarios de alto rango,
La medida incluye que el personal que se queda en Nicaragua debe permanecer en sus casas y evitar desplazamientos innecesarios sobretodo al final de la tarde y la noche, así como evitar las zonas de Managua más afectadas por las protestas.
Igualmente, el gobierno norteamericano prohibió a su personal el uso de autobuses públicos y mototaxis, como también visitar el Mercado Oriental en Managua y acudir a sitios nocturnos debido a la alta tasa de “criminalidad” que se registra.