A tan solo una semana de la firma de un acuerdo histórico, Estados Unidos inició una reducción de sus tropas en Afganistán para abandonar progresivamente el país a cambio de una disminución de la violencia.
La noticia fue anunciada este martes en un comunicado del portavoz del ejército en Afganistán, coronel Sonny Leggett, quien confirmó que el compromiso de retirar a 8.600 efectivos estadounidenses en 135 días había comenzado.
Sin embargo, añadió que “las fuerzas estadounidenses mantienen (en el país) todos los medios y autoridades necesarias para cumplir los objetivos, que incluye conducir operaciones antiterrorismo contra al-Qaeda y el grupo Estado Islámico y dar respaldo a la Defensa Nacional Afgana y las Fuerzas de Seguridad”.
«La fuerza está en proceso de cumplir los niveles de personal requeridos manteniendo las capacidades necesarias”, agregó.
Estados Unidos tiene ahora unos 13.000 soldados en Afganistán, de los cuales 8.000 participan en la instrucción y asesoría de las fuerzas de seguridad afganas y unos 5.000 se dedican a operaciones militares y antiterroristas en apoyo del ejército afgano.
Washington afirma que el tratado firmado con el Talibán el 29 de febrero es un esfuerzo por poner fin a 18 años de guerra en Afganistán.
Con información de la Voz de América.