Las reservas comerciales de petróleo en Estados Unidos volvieron a subir fuertemente la semana pasada por segunda ocasión consecutiva, muy por encima de lo esperado por los analistas.
Según el informe semanal de la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA) difundido el miércoles, las reservas estadounidenses de crudo subieron 13,8 millones de barriles (mb) a 498,4 mb al 5 de marzo. Esta cifra se explica por un alza de la producción por más actividad en refinerías luego de una ola de frío polar a mediados de febrero.
El mercado esperaba un alza más modesta, de 2,5 millones de barriles, según los analistas interrogados por la agencia Bloomberg.
Este fuerte incremento se explica por el aumento de producción tras la ola de frío que golpeó a mediados de febrero en particular a Texas, centro petrolero del país.
La producción en tanto pasó en la semana anterior de 10 a 10,9 mb diarios (mbd).
La semana pasada, la EIA dio cuenta de un aumento semanal récord de 21,6 mb.
La producción «repuntó a sus niveles anteriores a la tormenta de nieve, mientras que la actividad de refinación aún no se restablece», señaló Matt Smith, de ClipperData, para explicar el incremento de reservas.
Las refinerías operaron a 69% de su capacidad, un ritmo 13% superior al de la semana anterior, pero lejos de los porcentajes habituales para este período del año.
Las reservas de gasolina en tanto bajaron 11,9 mb y las de productos destilados 5,5 mb, «lo cual compensó la ‘explosión’ de stocks de crudo», destacó Smith.
El consumo en el país fue de 19,2 mbd, por debajo de la semana anterior y 11,2% menos que en igual período del año pasado.
Los precios del crudo subieron ligeramente este miércoles luego de una jornada volátil, tras el informe de reservas en Estados Unidos.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en mayo cerró en alza de 0,56% a 67,90 dólares en Londres.
En tanto en Nueva York el barril de WTI para entrega en abril ganó 0,67% a 64,44 dólares.
Según Andrew Lebow de Commodity Research Group, «las cifras son favorables a los precios». «Muestran una fuerte demanda por los productos livianos como la gasolina y el diesel. Es una buena señal, poco antes de la gran temporada de viajes» en auto del verano boreal en Estados Unidos, destacó.
Fuente AFP