Estados Unidos y sus aliados preparan una respuesta «rápida» ante la posibilidad de que Corea del Norte realice un nuevo ensayo nuclear, advirtió este lunes el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
«Corea del Norte ha completado los preparativos para otra prueba nuclear y creo que solo necesita una decisión política» para pasar a la acción, agregó su homólogo surcoreano, Park Jin, en rueda de prensa en Washington, y estimó que esto provocaría nuevas «sanciones internacionales».
«Seguimos preocupados por la perspectiva de lo que sería una séptima prueba nuclear», pero la primera desde 2017, coincidió Blinken.
«Estamos en contacto muy estrecho con nuestros aliados y socios cercanos, comenzando por la República de Corea, Japón y otros, para poder responder rápidamente», agregó.
«Estamos preparados para ajustar nuestra posición militar a corto y largo plazo, tanto como sea necesario», advirtió.
Corea del Norte ha multiplicado los disparos de misiles balísticos, incluidos los intercontinentales. Desde el mes pasado Washington estima que se dispone a romper su moratoria sobre los ensayos nucleares.
Blinken, aunque prometió mantener «la presión» hasta que el líder norcoreano, Kim Jong Un, cambie de actitud, aseguró sin embargo que Estados Unidos sigue dispuesto a un diálogo directo «sin condiciones previas».
AFP.