La tasa de desempleo bajó levemente en septiembre, retrocediendo hasta 3,5%, su nivel previo a la pandemia, pero la creación de empleo se ralentizó significativamente de la mano de la lucha contra la inflación.
La economía estadounidense generó 263.000 empleos el mes pasado, especialmente en los sectores del ocio, la hostelería y la salud, frente a los 315.000 de agosto, dijo el viernes el Departamento de Trabajo.
Los analistas habían anticipado una tasa de desempleo estable con respecto a agosto, en 3,7%, y esperaban la creación de 275.000 empleos.
El mercado laboral ha resistido en gran medida los costos de endeudamiento más altos y las condiciones financieras más estrictas, y los economistas dicen que las empresas son reacias a despedir trabajadores luego de las dificultades de contratación el año pasado, ya que la pandemia de COVID-19 obligó a algunas personas a dejar la fuerza laboral, en parte debido a la enfermedad prolongada causada por el virus.
Si bien los datos del Gobierno de esta semana mostraron que las vacantes se redujeron en 1,1 millones, la mayor disminución desde abril de 2020, a 10,1 millones el último día de agosto, todavía hay 4 millones más de vacantes que estadounidenses desempleados. Un sondeo del Instituto de Gerencia y Abastecimiento del miércoles mostró que varias industrias de servicios reportaron escasez de mano de obra en septiembre.