Algunos votan por Liz Truss, otros por Rishi Sunak, pero en el momento de designar al próximo jefe del gobierno británico miles de militantes conservadores lamentan que Boris Johnson haya «desperdiciado su oportunidad» y se interrogan sobre el futuro.
El jueves por la noche, algunos centenares de militantes se congregaron en la sala de fiestas de un hotel del aeropuerto de Norwich (este de Inglaterra), para escuchar a la ministra de Exteriores y a su rival, exministro de Economía.
Los candidatos se ganaron a la sala –mayoritariamente de jubilados– llamando al patriotismo, exaltando la responsabilidad individual, atacando a los laboristas y a los independentistas escoceses, sin olvidar a la Unión europea y el «wokismo».
Pero hubo una diferencia principal, en un contexto de inflación sin precedentes en 40 años y las astronómicas facturas de energía que amenazan el invierno boreal: Rishi Sunak defiende la idea de ayudas a los más desfavorecidos, mientras que Liz Truss aboga por bajar los impuestos
Esta propuesta es apoyada por Julian Kirk, de 61 años, agricultor y electo en un cargo local: «las empresas sufren los impuestos» elevados, afirma a la AFP este partidario de Truss
Asegura Kirk que confía en ella para hacerle frente al presidente ruso Vladimir Putin durante la guerra en Ucrania: «Si podemos pararlo, los precios de la energía volverán lentamente a retroceder»
Esta firmeza demostrada por Truss es también elogiada por Simon Jones, dirigente de los conservadores de Norwich, no lejos de una circunscripción que representa la ministra: «De todos los ministros, es ella la que hizo el mejor trabajo» estima este hombre de negocios de 56 años.
– Truss ‘apoyó a Boris hasta el final’ –
Quienes apoyan a Rishi Sunak insisten en su capacidad para mantener la actividad durante la crisis del covid-19, a veces a contracorriente de la ortodoxia liberal.
«No estoy a favor de ayudas indiscriminadas pero (…) uno de los deberes de los gobiernos es proteger a la gente» argumenta Iain Frost, de 37 años, bibliotecario, elegido a un cargo local desde 2007.
Según los últimos sondeos, Truss es la gran favorita, con más de 30 puntos de ventaja.
«Me sorprende que Rishi Sunak no sea más popular» confiesa John Crane, policía jubilado: «sus ideas económicas son muy sensatas»
Lo mismo opina Ian Dimmock, jubilado de 71 años: «debería haber un gran movimiento, no hacia un reducción de impuestos sino en favor de la gente que gana menos» dice, aunque se declara indeciso. Ambas candidaturas tienen «puntos fuertes», explica.
Los cerca de 200.000 militantes de los «Tories» tienen hasta el 2 de septiembre para votar. Los resultados se conocerán tres días después y como el partido tiene la mayoría absoluta en el Parlamento, su jefe de fila se convertirá en el nuevo inquilino de 10, Downing Street.
Pero el saliente Boris Johnson, menos de dos meses después de su dimisión causada por varios escándalos, entre ellos las fiestas durante el confinamiento, sigue en la mente de todos.
Simon Jones, que apoyó «ardientemente» al carismático Boris Johnson, admite que su salida era inevitable: «habíamos perdido la confianza de la gente», lo que se tradujo por derrotas en elecciones parciales.
Elizabeth Nockolds, jubilada de 71 años, que apoya a Rishi Sunak, explica: «Fue una gran decepción, porque (Johnson) es popular y llevó a cabo una buena política, pero para mí él debía hacer lo mismo que lo que pedía a la gente».
Algunos militantes no perdonan a Sunak haber precipitado el fin del gobierno al dimitir, mientras que Liz Truss «apoyó a Boris hasta el final, y eso es algo que tenemos muy presente» confía Julian Kirk.
Las próximas legislativas se celebraran a más tardar a principios de 2025.
«No nos va a sobrar el tiempo para trabajar por la recuperación de la economía», dice Dimmock, mientras Crane tiene dudas de que uno de los dos actuales candidatos pueda conducir a sus tropas a la victoria.
«Boris Johnson habría podido hacerlo, pero desperdició su oportunidad. Desgraciadamente, creo que el próximo gobierno será laborista»
AFP