Eso dijo el enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, quien se pronunció sobre la detención de Roberto Marrero, director del despacho del presidente encargado Juan Guaidó, y aseguró que esta es una reacción del régimen por el temor a la respuesta de la comunidad internacional a una posible detención del presidente interino.
Abrams agregó que debido a esto tratan de actuar contra su círculo más cercano, por lo que el Grupo de Lima, Canadá y Estados Unidos deben reaccionar inmediatamente contra esos acontecimientos.
Condenó los allanamientos y la posterior detención de Marrero y exigió su inmediata liberación.
Advirtió que habrá consecuencias directas para los responsables de este hecho y todos los involucrados en el futuro en otros allanamientos ilegales.
El funcionario norteamericano dijo además que actualmente no existe una línea roja, y continuarán con la política de apoyo al pueblo venezolano y al presidente Guaidó. “Vamos a seguir adelante con las acciones casi cada día”, agregó.