La primera dama de Venezuela, Fabiana Rosales, relató las difíciles horas que vivió este lunes en torno a la última movida del régimen de Nicolás Maduro, que resultó en un intento fallido de llevarse al presidente encargado, Juan Guaidó, y la detención arbitraria del dupitado de la legítima Asamblea Nacional (AN), Freddy Guevara.
Ambos ataques ocurrieron simultáneamente.
Fabiana pasaba a recoger a su hija Miranda cuando su teléfono le notificó que Guevera se encontraba ‘en vivo’ a través de Instagram. Su intuición, cuenta, le guió para que entrara a ver la trasmisión y fue cuando ocurrió lo que ella más temía: «Se llevaron a Freddy» y contactó a su esposo y a la diputada Delsa Solórzano para comunicarles lo sucedido.
“En ese momento lo primero que pensé no puedo devolverme a la casa con Miranda, no quiero que pase de nuevo por esta situación”, explicó durante el programa La Mañana de EVTV con el periodista Carlos Acosta.
Desde entonces la situación empeoró. Fabiana y Juan habían acordado trasladarse hasta donde estaba Freddy Guevara, donde presume había sido en la autopista Prados del Este a la altura del Centro Comercial Ciudad Tamanaco (CCCT). Es entonces cuando sus vecinos le notifican que cuerpos de seguridad del régimen del Maduro habían ingresado su residencian para intentar secuestrar al presidente Guaidó.
La dictadura no pudo llevarse detenido al mandatario interino gracias a la presión de vecinos, el equipo de prensa y toda la información que se difundió de inmediato en redes sociales.
Para Fabiana, las situaciones de acoso, amendrentamiento y asedio son comunes, sin embargo señala que «el régimen siempre se supera a si mismo, entonces te toca llevar a ese situación constante. «El régimen no te amenaza, el régimen actúa», añade.
«Ninguna aspiración personal debe estar por encima de nuestro país”
La primera dama reconoce que «hay todo un país y toda una región esperando que haya una solución al conflicto» de Venezuela, es por ello que tanto ella como el presidente Guaidó se mantiene firmes en la búsqueda de un Acuerdo de Salvación Nacional para regresar la democracia y la paz al país caribeño, a pesar de la persecución que sufren tanto ellos como otros dirigentes de la alternativa democrática.
«El Acuerdo de Salvación Nacional no es para Juan Guaidó es para el país. Ninguna aspiración personal debe estar por encima de nuestro país. No hay nada por encima de lo que necesita este país y nosotros estamos dispuestos», sentencia.
Desde lo humano, Fabiana recuerda que Venezuela sigue atravesando una pandemia y una crisis compleja en materia migratoria, alimentaria y sanitaria.
«Vemos desplazados en la misma ciudad de Caracas» en referencia a las familias que tuvieron que abandonar sus hogares antes las jornadas de violencia que propiciaban bandas criminales de la Cota 905, en la víspera de la visita de la misión técnica de la Unión Europea (UE) para determinar si es viable llevar a cabo unos comicios regionales en el próximo mes de noviemre.
Fabiana envío un mensaje a las madres venezolanas
Como madre, la primera dama asegura que su situación no es distinta a la de otras mujeres venezolanas a las que la dictadura criminal de Maduro también le robó la infancia. Todas las mujeres somos acosadas, maltratadas y nuestros hijos de vivir una infancia feliz, les están quitando la oportunidad de simplemente ser niños», dice. El Acuerdo de Salvación Nacional también salva a las familias.