Este comité de expertos son quienes aprueban las vacunas contra la gripe y otras vacunas en los EE. UU., Verificando que las vacunas sean seguras para el uso público.
Afirman que entre los argumentos que forman parte de este primer paso está que el Reino Unido y Canadá ya se había aprobado el biológico, y en la revista New England Journal of Medicine se publicó este jueves el resultado de estudios de la vacuna, donde se corroboraba su efectividad.
Según el portal de noticias NBC, la FDA podría otorgar la autorización de uso de emergencia de la vacuna de Pfizer tan pronto como el viernes, dijo James Hildreth, miembro del comité, al programa «Weekend Today» de NBC.
Una autorización de uso de emergencia, o EUA, generalmente permite que un medicamento o vacuna se administre a una población o entorno limitado, como pacientes hospitalizados, mientras la agencia continúa evaluando los datos de seguridad.
Aún no queda completamente claro si la FDA autorizará la vacuna de Pfizer y BioNTech para su uso en ciertos grupos, como es el caso de las mujeres embarazadas los niños menores de 16 años.
El comité votó 17-4 a favor de que los beneficios conocidos de la vacuna, desarrollada por Pfizer con la alemana BioNTech , superaron los riesgos en adultos de 16 años o más tras recibir la inyección.
El voto a favor del comité, sin embargo, no es vinculante y no significa que se haya dado automáticamente luz verde a la vacuna, ya que corresponde a la FDA adoptar la decisión final.
Autoridades de salud de los estadounidenses afirman estar preparados para distribuir la vacuna dentro de las 24 horas posteriores a la autorización. Las dosis iniciales serán limitadas a medida que aumente la fabricación, y los funcionarios predicen que se necesitarán meses para inmunizar a todos en los EE. UU.
Pfizer ha dicho que planea enviar 50 millones de dosis de vacunas este año, suficiente para inocular a 25 millones de personas. Se espera que la vacuna se distribuya en fases, y que los trabajadores estadounidenses más críticos y las personas vulnerables la reciban primero.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han proporcionado a los estados un esquema que recomienda priorizar primero a los trabajadores de la salud y los hogares de ancianos, pero los estados pueden distribuir la vacuna como mejor les parezca.