La Fiscalía de Bolivia emitió una acusación formal por supuestos delitos de terrorismo contra el ex presidente del país Evo Morales, quien se encuentra en Argentina, en la que pide su detención preventiva. La acusación fue emitida por la Comisión de Fiscales Anticorrupción, informó este lunes la Fiscalía General del Estado de Bolivia.
La Comisión de Fiscales Anticorrupción de Bolivia acusó formalmente este lunes al ex presidente de Bolivia, Evo Morales, de cometer el delito de terrorismo, y pidió su detención preventiva.
En concreto, la causa se sustenta en una serie de audios en los que una voz, atribuida al ex mandatario, instruye a un dirigente cocalero a bloquear caminos e interrumpir el suministro de alimentos a distintas ciudades en el marco de los disturbios sociales catalizados por las elecciones fraudulentas en el país.
La imputación por supuestos delitos de terrorismo y financiamiento del terrorismo se basa en una conversación telefónica con el dirigente cocalero Faustino Yucra.
«De acuerdo con las investigaciones, se evidenció que el exj efe de Estado y el coimputado Faustino Y.Y. mantuvieron comunicación mediante llamadas telefónicas el 14 de noviembre de 2019, desde la ciudad de México», donde entonces estaba Morales, «hasta El Torno», en Bolivia, según un comunicado de la Fiscalía.
La investigación había comenzado el pasado 20 de noviembre, luego de que el ministro de Gobierno de la administración interina de Jeanine Áñez, Arturo Murillo, publicara la información.
Este lunes los fiscales decidieron imputar formalmente a Morales y pedir su detención, en lo que representa el primer movimiento significativo de la causa contra Morales desde entonces.
Según consignó el medio local El Deber, un informe del Centro Tecnológico de Investigación de Colombia determinó hace más de cuatro meses que había una “alta probabilidad de identificación” entre la voz del audio y la del ex mandatario.
El gobierno interino continúa a cargo del Ejecutivo, luego de que las elecciones especiales fueran pospuestas por la pandemia del nuevo coronavirus. Los nuevos comicios, que deberían haber tenido lugar en mayo, fueron reprogramados para el próximo 6 de septiembre.
Áñez, no obstante, mantiene que no se puede ir a las urnas “en plena pandemia” por la COVID-19, que según estimaciones de su gabinete puede tener un pico en el país precisamente a comienzos de septiembre.
La también candidata promulgó la ley, pero asegurando que solo lo hacía por “presiones” de otros candidatos como el ex presidente Carlos Mesa, de la agrupación Comunidad Ciudadana, y el ex ministro Luis Arce, del Movimiento al Socialismo (MAS), designado por Morales como representante del partido que lidera.
Mesa, Arce y otros candidatos critican que su Gobierno es transitorio, no salió de las urnas y no puede prorrogarse indefinidamente con argumentos como la emergencia sanitaria ante el coronavirus. Bolivia cuenta ya 39.297 casos confirmados, incluidas 1.434 víctimas mortales, con Santa Cruz y Beni como principales focos de contagio.
La ley la presentó el órgano electoral tras un acuerdo con varias de las ocho candidaturas que concurren a los comicios y fue aprobada en el Parlamento, donde tiene mayoría el MAS.