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Fracasa diálogo gobierno-oposición para definir censo en Bolivia y vuelven choques callejeros

El gobierno boliviano y representantes de la región opositora de Santa Cruz fracasaron en acordar una fecha para un controvertido censo de población, y partidarios y detractores del Ejecutivo volvieron a enfrentarse este miércoles en las calles.

La próspera región de Santa Cruz, motor económico del país y bastión de la oposición, exige un censo que actualice su representación legislativa y la cantidad de fondos estatales que recibe, en función de una cantidad de habitantes que considera superior a la que maneja la última estadística oficial.

Vicente Cuéllar, encargado por el departamento de Santa Cruz (este) para discutir con el gobierno la fecha del censo, dijo que el Poder Ejecutivo mantuvo su posición de realizarlo en 2024 y no en 2023 como demanda la oposición.

«Hemos hecho todos los esfuerzos para convencer a una pared que no entiende de razones», afirmó Cuéllar, tras abandonar una mesa de negociaciones que comenzó el pasado fin de semana.

Santa Cruz cumple este miércoles 19 días de protestas, con cortes de calles, avenidas y carreteras interdepartamentales.

El ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, respondió por parte del gobierno, que los emisarios de Santa Cruz «abandonaron el escenario de diálogo» la noche del martes y «no pudieron justificar de manera técnica» un censo en 2023.

Por tal motivo, señaló que el Ejecutivo ratifica que el censo se realizará «entre marzo y abril del año 2024».

Para las próximas horas, se espera un decreto del presidente Luis Arce (izquierda) para ratificar la fecha del estudio.

El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho (derecha), anunció que su región «aumentará sus medidas de presión» ante el fracaso del diálogo.

Santa Cruz, la locomotora económica de Bolivia, fue nuevamente escenario este miércoles de choques callejeros entre oficialistas, que cortaron vías terrestres, y opositores, que quieren libre circulación.

Los choques se registraron en el barrio «Plan 3.000», fuertemente poblado por simpatizantes del gobierno de Arce, con saldo de cuatro lesionados y varios detenidos.

La policía antimotines llegó al lugar y utilizó gases lacrimógenos, según imágenes difundidas en redes sociales.

Desde el inicio de las protestas, el pasado 22 de octubre, se registraron enfrentamientos que dejaron un muerto, varios heridos y al menos una decena de detenidos.

AFP