Nallely Esparza Flores, una maestra mexicana de Aguascalientes, recibió un inesperado obsequio de Nissan México. La compañía de automóviles la sorprendió con una camioneta NP300, adaptada con un cómodo y espacioso salón de clases, para que ella pueda seguir con su labor de llevar educación a niños y niñas que no pueden conectarse a clases por internet.
Ante los retos que que derivan de la pandemia por COVID-19, la educadora decidió usar su camioneta pick up para ir hasta las casas de sus alumnos y continuar con su educación sobre la gastada camioneta. Los niños recibían clases sobre una mesa de plástico que la misma educadora dispuso en la zona de carga de su vehículo.
“Mis alumnos ya no tendrán que tomar clases a pleno rayo del sol. Tardaba alrededor de cuatro horas recorriendo todas las casas dando seguimiento y apoyo a mis alumnos; jamás imaginé esta iniciativa por parte de Nissan. Ahora, mis tiempos de recorrido, sin duda, serán más cortos, seguros y cómodos”, contó Nelly tras recibir el obsequio.
Un salón de clases portátil