El pasado sábado 4 de mayo, las intensas lluvias inundaron vecindarios en las cercanías de Houston, provocando más de 400 operaciones de rescate en hogares, techos y carreteras sumergidas bajo agua turbia en esta región de Texas. Mientras tanto, otros residentes se disponían a evacuar sus propiedades.
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Un aviso de inundaciones estaba en vigor hasta el domingo por la tarde, y los meteorólogos pronosticaron más lluvias desde el sábado por la noche, con la posibilidad de inundaciones graves en el condado Harris, el tercero más poblado del país, que abarca Houston y sus áreas adyacentes, reseñó Voz de América.
“Se espera un receso en las fuertes lluvias hasta la tarde (del sábado)”, indicó el Servicio Meteorológico Nacional. “La siguiente ronda de fuertes lluvias se espera por la noche y el domingo”.
Se esperaba una acumulación adicional de hasta 7,6 centímetros de agua, con posibles registros de hasta 12,7 cm en áreas específicas.
Las autoridades de Houston no han informado de víctimas mortales ni heridos. La jueza Lina Hidalgo, la funcionaria de mayor rango electa del condado, declaró el sábado que hasta el momento se habían rescatado 178 personas y 122 mascotas en la región.
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Grandes sectores han quedado anegados, desde Houston a la zona rural del este de Texas, donde guardias forestales utilizaron lanchas en aguas que llegaban a la cintura para rescatar a personas y mascotas que no evacuaron a tiempo. Un equipo llevaba a una familia y tres perros mientras el agua rodeaba sus autos y su casa.
“Va a ser subiendo así”, dijo Miguel Flores Jr., del vecindario de Kingwood, en el nordeste de Houston. “No sabemos mucho más. Simplemente nos preparamos para lo peor”.