“Fue duro, pasé hambre y sed, pero hoy tengo un compromiso con Venezuela y VP», fueron las primeras palabras del diputado suplente Gilber Caro, al quedar en libertad la mañana de este domingo, luego que el sábado Delcy Rodríguez, presidenta de la Constituyente fraudulenta, firmara su boleta de excarcelación junto con la de otros 39 presos políticos, en la segunda jornada de liberaciones que adelanta el régimen de Maduro.
Pasaron más de 16 horas desde que se dio la orden de su excarcelación hasta que la misma se hizo efectiva, al salir de la Casa Amarilla donde se desarrolló el proceso de liberación, Caro fue devuelto al Centro Penitenciario Fénix en el estado Lara, donde estuvo recluido los últimos meses.
Fueron 15 meses de prisión, durante ese tiempo el parlamentario fue trasladado a cinco cárceles de presos comunes. No sólo violaron su inmunidad parlamentaria sino también sus derechos humanos, lo mantuvieron aislado y en una pequeña celda, la comida se la hacían llegar descompuesta o congelada. Caro perdió 10 kilos en prisión y sufrió de amibiasis, porque cada siete días era que le daban sólo sólo tobos de agua, los cuales tenía que administrar para bañarse, limpiar sus necesidades y beber para combatir la sed o un cuadro de desnutrición.
Sin embargo, el ex preso político Gilber Caro, pudo salir en «libertad condicional» y se reencontró con sus familiares, amigos y compañeros de lucha. Al salir lo primero que hizo fue alzar orgulloso su boleta de excarcelación y besar el piso por donde se trasladaría en su nuevo camino hacia la libertad.