Un juez federal sentencio que las demandas contra el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por mantener sus acciones en un hotel de Washington que hospeda a funcionarios de gobiernos extranjeros continuaran.
El juez Robert Messitte, del estado de Maryland acusó a Trump de corrupción basado en las conocidas “cláusulas de emolumentos” que establece las Constitución norteamericana, lo que corresponde a la primera imputación de este tipo a un presidente en ejercicio.
El caso, que ha causado revuelo en la opinión pública desde su comienzo, se refiere a los ingresos obtenidos por el Trump International Hotel, ubicado cerca de la Casa Blanca.
Trump desde su llegada a la Casa Blanca se ha negado a divulgar información sobre los ingresos del Hotel, además de mantener en secreto su declaración de impuestos, algo que sus antecesores tenían la costumbre de hacer.
Según la Constitución de los EEUU las cláusulas hoy utilizadas para la acusación, prohíben al Presidente de la Nación beneficiarse financieramente de gobiernos locales y extranjeros.
Los demandantes — creen que Trump viola estas cláusulas con su hotel, que es muy popular entre las delegaciones oficiales que llegan a Washington.
El Departamento de Justicia de los EEUU trato que los demandantes, que son el estado de Maryland y el Distrito de Columbia, desestimaran la demanda, argumentando que las cláusulas no se aplicaban al caso del hotel, sino que buscaban evitar que un presidente acepte sobornos de cualquier índole.