El Nuncio Apostólico, Monseñor Aldo Giordano rechazó este miércoles la condecoración concedida por el dictador de Venezuela Nicolás Maduro, y aseveró que durante los años que se desempeñó como Nuncio en Venezuela, su compromiso fue con «servir a la paz, a la reconciliación y al diálogo»
Durante el acto con motivo de su despedida del país, luego de que fuera transferido por el papa Francisco como representante de Venezuela ante la Unión Europea, en Bruselas, Giordano enfatizó su compromiso con la paz y el servicio.
«El Presidente muy amablemente me llamó a darme una condecoración, pero debo renunciar a ello porque venimos al país a ayudar, puedo decir que en estos siete años intenté servir a la paz, a la reconciliación, al diálogo», recalcó.
«He tenido la suerte de despedirme de Venezuela con la beatificación de José Gregorio Hernández, queda en mi corazón (…) En estos años alimenté la amistad entre nosotros. Es muy difícil dejar Venezuela. El pueblo de Venezuela me ha robado el corazón, he tenido la suerte de visitar muchos lugares» afirmó.