El Gobierno mexicano corrigió este martes en 38 el número de migrantes muertos por un incendio ocurrido el lunes cerca de la medianoche en una estación del Instituto Nacional de Migración (INM) de México en Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos, y situó el de heridos en 28.
«En un recorrido que realizaron autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) por los distintos hospitales en los que fueron internadas las víctimas para su atención inmediata, se actualizó la cifra de personas fallecidas y se confirmaron 38 decesos», apuntó en un comunicado el INM.
Previamente, el INM indicó que a las 14.00 horas locales tenía un registro de 40 migrantes extranjeros fallecidos y 28 lesionados; además brindaba asistencia a 15 mujeres extranjeras mayores de edad que fueron desalojadas de la estancia provisional cuando inició el incendio en el área de alojamiento de la sede migratoria».
En la nota se apuntó además que el INM colaboraba con la Fiscalía General de la República (FGR) y con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) con «testimonios y pruebas para esclarecer la verdad de lo ocurrido» el lunes por la noche en Ciudad Juárez, Chihuahua.
Esta mañana, la FGR indicó en un comunicado que los migrantes identificados «son de las siguientes nacionalidades: 1 colombiano, 1 ecuatoriano, 12 salvadoreños, 28 guatemaltecos, 13 hondureños y 13 venezolanos», aunque sin precisar fallecidos y heridos.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, detalló en su rueda de prensa matutina que el incidente ocurrió a las 21.30 horas (04.30 GMT) en Ciudad Juárez, en la frontera con la ciudad estadounidense de El Paso, Texas, donde primero hubo un saldo inicial de 37 fallecidos, la mayoría de ellos de Centroamérica y Venezuela.
López Obrador responsabilizó a una protesta de migrantes por el incendio.
«Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de iban a ser deportados, movilizados, y como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego», declaró.
El mandatario «informó que el siniestro se produjo a causa de una protesta y que el director del INM (Francisco Garduño) y la FGR (Fiscalía General de la República) ya investigan para deslindar las responsabilidades», según remarcó Ramírez Cuevas.
Antes del incidente, los agentes del INM habían hecho un operativo para remover de las calles a migrantes que piden limosna.
La presencia de migrantes en la zona se ha intensificado este año desde que Estados Unidos anunció nuevas medidas, que incluyen la deportación inmediata de migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que lleguen por tierra bajo el Título 42.
El Gobierno mexicano también ha afrontado críticas de organizaciones de derechos humanos por aceptar las políticas estadounidenses y desplegar a más de 20.000 elementos de las Fuerzas Armadas en las fronteras para tareas migratorias.
Según organizaciones civiles mexicanas, 2022 fue el año más trágico para los migrantes en México, pues unos 900 murieron en el intento de cruzar sin documentos desde el país hacia Estados Unidos.
La región vive un flujo migratorio récord, con 2,76 millones de indocumentados detenidos en la frontera de Estados Unidos con México en el año fiscal 2022.
Con información de Efe