El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, calificó este martes de «crítica» la situación en Cuba, donde se ha visto un «aumento en la censura y la represión» sobre quienes expresan su desacuerdo, una realidad que no se puede «invisibilizar», precisó.
«La situación es crítica, constantemente se reportan casos de intimidación, acoso, detenciones arbitrarias de periodistas independientes, personas críticas que se atreven a expresar sus opiniones» contra el gobierno de Miguel Díaz-Canel, dijo Almagro durante un panel dedicado a la situación de los derechos humanos en el país caribeño.
En la reunión, celebrada en la sede de la organización en Washington, participaron activistas, periodistas y artistas opositores cubanos en el exilio, varios de ellos víctimas de intimidaciones y censura por parte de las autoridades.
Cubanos agitan banderas durante una concentración política celebrada en la Plaza Antimperialista «José Martí» de La Habana, el 18 de noviembre de 2002, en protesta de las agresiones del gobierno de EE.UU hacia Cuba. Del acto partiparon unas 150 mil personas. (Photo by NIURKA BARROSO / AFP)
Anamely Ramos, una de las caras más conocidas del opositor Movimiento San Isidro, recordó el continuo hostigamiento que sufrió junto a compañeros como el artista Luis Manuel Otero Alcántara y el rapero Maykel Castillo, desde que el grupo encabezó un plantón frente al Ministerio cubano de Cultura en 2020 para exigir más apertura y respeto para el arte independiente.
Ramos aseguró que la represión aumentó después de las protestas del 11 de julio de 2021, cuando la isla vivió inéditas manifestaciones masivas en casi todo el país, motivadas en gran parte por el empeoramiento de las ya difíciles condiciones económicas.
La curadora de arte fue impedida de regresar a Cuba hace unos meses, una práctica que ya ha sido denunciada en numerosas ocasiones, entre ellas, por periodistas del medio El Toque, que se ha visto obligado a mudar su redacción al extranjero debido a las presiones del gobierno.
«Yo no estaría hablando hoy aquí si Cuba no me hubiera impedido regresar en febrero del año pasado (…) La prohibición de regresar a nuestra patria -además de arrojarnos a una situación de indefensión extrema- es el castigo por tratar de ejercer la ciudadanía y una nueva forma de control de la libertad de expresión; esta vez más allá de las fronteras de Cuba», denunció Ramos.
Seguir prestando atención a Cuba
El representante de EEUU ante la OEA, Frank Mora, subrayó que «la carta democrática de la OEA afirma claramente que todos los pueblos de las Américas tienen derecho a vivir en democracia y sus gobiernos tienen la obligación de promoverla y defenderla».
«Lamentablemente para las personas de Cuba las realidades previstas en la carta democrática siguen siendo una esperanza lejana (…) Tenemos una importante de responsabilidad de recordar a aquellos en Cuba que aún languidecen bajo una tiranía que les deniega las libertades fundamentales más básicas y la dignidad humana», advirtió.
Al cierre de marzo, en Cuba se registraban al menos 1.006 presos políticos y de conciencia, de acuerdo a datos confirmados por la oenegé Prisoners Defenders.
El director de la organización, Javier Larrondo, afirmó durante el panel que han podido verificar que en estos casos los prisioneros cumplen condenas judiciales o disposiciones de limitación de libertad sin supervisión judicial ni defensa jurídica, en violación de del debido proceso.
«Sólo en los últimos 12 meses hemos confirmado y añadido a nuestra lista 250 nuevos prisioneros políticos nuevos en Cuba», aseguró Larrondo.