El departamento de Justicia de Estados Unidos ordenó el viernes al Tesoro entregar al Congreso los registros fiscales de Donald Trump, en un avance de una investigación iniciada en 2019 sobre las finanzas del ex presidente.
El Departamento consideró que el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes tiene motivos legítimos para verlos. El Comité busca revisar seis años de registros fiscales de Trump que algunos creen que podrían exponer una contabilidad cuestionable.
«El acceso a las declaraciones de impuestos del expresidente Trump es una cuestión de seguridad nacional», dijo la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi.
«El pueblo estadounidense merece conocer los hechos de los preocupantes conflictos de interés (de Trump) y como socavó nuestra seguridad y democracia siendo presidente».
La decisión del departamento de Justicia es el segundo revés legal que sufre Trump este año contra sus esfuerzos por evitar publicar sus declaraciones de impuestos, que incluyen activos, ingresos y pago de impuestos.
En febrero, la Corte Suprema se negó a bloquear la citación de un fiscal de Nueva York que investiga sus empresas y negocios financieros personales para acceder a las declaraciones de impuestos del expresidente.
Aunque en ese caso, los registros están protegidos para que no se divulguen al público.
Si los registros se entregan al Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara -en el marco de una pesquisa sobre el IRS, la dirección de rentas de Estados Unidos- hay muchas más posibilidades de que se revelen.
Todos los presidentes estadounidenses desde que Richard Nixon, quien asumió el cargo en 1969, han hecho públicas sus declaraciones fiscales y patrimoniales.
Pero ya desde antes de ser elegido presidente, Trump se niega a divulgar datos sobre sus ingresos, alegando que sus registros estaban «bajo auditoría» por parte del IRS.
De ser cierto, esa auditoría aún estaba incompleta cuando Trump dejó el cargo el 20 de enero, un tiempo extraordinariamente largo para que tal proceso aún siga en curso.
Mientras, los departamentos del Tesoro y de Justicia, en aquel momento dirigido por leales a Trump, resistió las citaciones para entregar los registros, lo que obligó al comité a llevar el caso a los tribunales.
El presidente del comité, Richard Neal, había argumentado que sus miembros necesitaban las declaraciones para comprender la forma en que el IRS realiza sus auditorías presidenciales y si Trump había ejercido una «influencia indebida» sobre la agencia.
«Sin una revisión de las declaraciones (de impuestos) solicitadas, el comité no puede garantizar que el proceso de auditoría del IRS esté funcionando de manera justa y eficaz, ni comprender de qué forma las disposiciones del código tributario están implicadas en las declaraciones del presidente Trump, o (…) determinar si los cambios al código pueden estar justificados», dijo el panel en 2019.
Detrás de esas preguntas hay sospechas de si Trump manipuló el código tributario para pagar muy poco, violando las leyes tributarias, como se alega en la investigación de Nueva York.
Fuente AFP