Por primera vez en casi cuatro años de gobierno, Mike Pence, actual vicepresidente de Estados Unidos, contradijo en público a su coequipero, el presidente Donald Trump.
Este miércoles, en la víspera de una sesión en la que el Congreso ratificará la victoria electoral de Joe Biden, Pence envió una carta en la que aclaró que no tiene “autoridad unilateral” para revocar el resultado emanado de los comicios del 3 de noviembre.
“Mi juramento de apoyar y defender la Constitución me limita a reclamar la autoridad unilateral para determinar qué votos electorales deben contarse y cuáles no”, escribió el vicepresidente en la misma que dirigió a los legisladores.
Con sus palabras, Mike Pence dio por sentado que no admitirá presiones y que, en consecuencia, convalidará el triunfo de quien fue su antecesor.
Desde el inicio de esta semana, Donald Trump emprendió una cruzada con la intención de torcer la voluntad de Mike Pence, quien, por ser vicepresidente, es también el presidente de la Cámara de Senadores.
“Espero que Mike Pence nos ayude. Si no lo hace, no me caerá tan bien”, dijo Trump el pasado lunes. “El vicepresidente tiene el poder de rechazar a los electores fraudulentamente escogidos”, aseguró el martes.
Este miércoles, durante un acto de masas celebrado en Washington D.C., el magnate hizo un último esfuerzo al afirmar que, si Pence no accedía a su demanda, el de hoy sería “un día triste” para Estados Unidos.