Este lunes, el presidente de Colombia, Iván Duque, lunes solicitó a la administración de los Estados Unidos declarar al régimen de Venezuela encabezado por Nicolás Maduro como principal patrocinante del terrorismo.
” Iván Márquez está en Venezuela. Romaña está en Venezuela. El paisa está en Venezuela. También allá están Antonio García y Pablitos, por solo mencionar algunos. Claramente esa anuencia amerita una declaratoria por parte de Estados Unidos como un país promotor del terrorismo”.
«Claramente esa anuencia del régimen dictatorial de Venezuela amerita una declaratoria por parte de los Estados Unidos como un país promotor del terrorismo», reclamó Duque en un evento en el que participó el embajador estadounidense en Colombia, Philip Goldberg.
«Y esa declaración tiene como objetivo no solamente develar esa relación connivente y perniciosa, sino también que puedan ellos tomar un camino o seguir patrocinando al terrorismo o entregar el terrorismo a las autoridades de los países que los están buscando», añadió el mandatario.
Duque ha acusado en reiteradas ocasiones al gobierno de Nicolás Maduro de dar refugio en territorio venezolano a rebeldes disidentes de las FARC y guerrilleros del ELN.
Según Colombia, un comando de esos grupos con apoyo de un exmilitar disparó ráfagas de fusil contra el helicóptero en el que viajaba Duque mientras se aproximaba a un aeropuerto en la fronteriza ciudad de Cúcuta. Ni el presidente ni sus acompañantes resultaron heridos.
El ataque fue planeado desde Venezuela por guerrilleros que se apartaron del histórico acuerdo de paz firmado en 2016 con los rebeldes de las FARC, dijeron autoridades.
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, negó en Twitter los señalamientos y aseguró que «otra vez usan a Venezuela para tratar de ocultar la tragedia» de Colombia sumida en la «violencia» y el «narcotráfico».
Estados Unidos considera como países patrocinadores al terrorismo a Irán, Corea del Norte, Siria y, recientemente, volvió a incluir a Cuba en esa lista.
– «No le tenemos miedo» –
En el marco de la investigación del ataque contra la aeronave presidencial fueron detenidos un capitán pensionado del ejército y tres de sus cómplices, todos con supuestos vínculos con las disidencias que se marginaron del proceso de paz.
Según las pesquisas, dos fusiles AK47 con la marca de las fuerzas armadas de Venezuela fueron encontrados en la zona del atentado.
Los capturados también estarían detrás del coche bomba que estalló el 15 de junio en una instalación militar de la misma región fronteriza, que dejó 44 heridos.
En total hay diez integrantes del frente 33 de las disidencias de las FARC detenidos por ambos hechos.
El grupo «disidente de las FARC que perpetró el ataque a la brigada 30 y también atentó contra mi persona, dicen ellos que pretenden seguir con esos planes, (…) no le tenemos miedo a ninguna de esas amenazas, ni nos amedrentan, ni nos amainan, ni nos disminuyen», señaló Duque.
Y al mismo tiempo le lanzó una advertencia: «Que le quede claro (…) que lo vamos a desmantelar por completo, lo vamos a doblegar y se hará firme la nación colombiana frente a cualquier forma de terrorismo».
Las relaciones de Colombia y Estados Unidos -estrechos aliados- con Venezuela completan décadas de tensiones, pero se agravaron luego de que Washington y Bogotá calificaran de fraudulenta la reelección de Maduro en 2018 y reconocieran al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino.
Sin relaciones diplomáticas desde 2019, Colombia y Venezuela comparten una porosa frontera de 2.200 kilómetros.
Duque tilda a Maduro de «dictador» y lidera la presión internacional para sacarlo del poder.
Caracas niega dar refugio a grupos ilegales colombianos en su territorio y acusa a Washington y Bogotá de participar en un complot para desestabilizar su gobierno con el apoyo de la oposición venezolana.
Colombia, principal exportador de cocaína del mundo, enfrenta el peor rebrote de violencia desde la firma de la paz con las FARC.
Con información de AFP